Habitantes de mi casa

            Hasta este momento, aquí, en mi nuevo diario cantaba sólo sobre mi infancia en Fuendetodos y mis relaciones con mi hijo. Si alguien leyera mi diario, podría pensar que soy un hombre viejo, solo y sin familia. De verdad los últimos días he pasado como un viudo, porque Leocadia y Rosario habían ido a España para visitar a su familia. Algunos de nuestros vecinos piensan que Leocadia y yo estamos casados pero eso es mentira. En el pasado, cuando vivía en Madrid teníamos una aventura amorosa, pero ahora sólo somos amigos, Lea me ayuda mucho. ¡ Que mujer! Abandonó a su marido después de 6 años de matrimonio y le dejó a cuidar dos hijos. Consigo trajo sólo la hija menor, la dulce Rosario. Aunque su esposo se llamaba Weiss, ella toda su vida usaba el apellido de sus padres- Zorilla Y Galarza. Otra idea de mis vecinos es que Rosario es mi hija. Desgraciadamente, este asunto no esta claro, porque en el mismo tiempo Leocadia vivía con su marido y también en secreto se encontraba conmigo. Soy un hombre bien educado, entonces nunca había preguntado sobre eso. Si ella hubiera querido decírmelo, lo hubiera hecho. Para muchos personas esta situación podría ser extraña e indecente, pero para mí es normal. Estoy feliz y eso es más importante. Leocadia hace todos los trabajos en casa y en jardín. Yo doy clases de dibujar a Rosario, porque es muy talentosa y también vendo mis dibujos y cuadros. Es interesante si Javier reconocerá a Lea cuando ella regresará de España. Primera y última vez cuando Javier la había visto durante su boda fue hace muchos años...

           

Leocadia Zorilla y Galarza